jena of the day: si telefoneas, no conduzcas.
No sé si les pasa a uds., pero un servidor está hasta los cojones de la gente que habla por el móvil mientras conduce. A estos sí que les quitaba yo 300 puntos del carnet y, además, les daba un par de hostias a ver si espabilan, porque el principal efecto secundario de las conversaciones con el nokia de turno mientras se conduce el consabido kiapicanto es un sobreempanamiento del 450%.
Es decir, normalmente la gente que habla por el móvil mientras conduce ya es medio atontada genéticamente, pero al descolgar el susodicho aparato se vuelven idiotas absolutos. Porque, ¿de verdad es imprescidible contestar mientras se conduce para decir 'estoy llegando'? ¿el concepto contestador es que no le entendemos? ¿en serio que es fundamental contarle a puchi lo superestupendo que te ha ido el finde mientras entras en la M30? ¿no puede todo esto esperar un ratito y así estamos en lo que estamos?
Pues no.
Y no es una opinión que tenga yo, es que lo he estudiado científicamente y caracterizado a los hominidos nokiamotorola en 4 subespecies. Y las conclusiones son apabullantes.
- Los Telemarketings: sandwichean el móvil entre el moflete y el hombro izquierdo. Parece una postura segura puesto que permite sujeccionar el volante (el guía, como decía mi abuelo) con ambas manos. Sin embargo, el hecho de tener que realizar un giro cabecístico de 45º hace que la perspectiva visual no sea la más correcta, motivo por el cual tienden a subirse en los bordillos para poder mirar recto.
- Los Quenosemenote: Ocultación del celular entre palma de la mano y oreja. La suerte natural es a izquierdas, controlando el guía con la derecha. Los más arriesgados optan por la suerte cambiada, a derechas, también denominada Quenosemenote Nidecoña.
- Los Cruzadomágico: sujección de auricular con mano izquierda y gestión direccional con la derecha, con un contorsionismo que limita el giro de la cabeza hacia la derecha, con lo cual vale más que vayamos recto.
- Los Sinmanos: en teoría son los legales. Pero son igual o más peligrosos que los demás. Porque, si se fijan uds., los que hablan por el manos libres, en un 78% miran a la radio mientras se comunican como si estuviera allí el que les habla. Así que es casi mejor coger el móvil con las dos manos, que por lo menos ves por donde vas.
Y me juego 50 pavos a que el carnetporpuntos no acaba con estas subespecies ni de coña. Una jena.
Es decir, normalmente la gente que habla por el móvil mientras conduce ya es medio atontada genéticamente, pero al descolgar el susodicho aparato se vuelven idiotas absolutos. Porque, ¿de verdad es imprescidible contestar mientras se conduce para decir 'estoy llegando'? ¿el concepto contestador es que no le entendemos? ¿en serio que es fundamental contarle a puchi lo superestupendo que te ha ido el finde mientras entras en la M30? ¿no puede todo esto esperar un ratito y así estamos en lo que estamos?
Pues no.
Y no es una opinión que tenga yo, es que lo he estudiado científicamente y caracterizado a los hominidos nokiamotorola en 4 subespecies. Y las conclusiones son apabullantes.
- Los Telemarketings: sandwichean el móvil entre el moflete y el hombro izquierdo. Parece una postura segura puesto que permite sujeccionar el volante (el guía, como decía mi abuelo) con ambas manos. Sin embargo, el hecho de tener que realizar un giro cabecístico de 45º hace que la perspectiva visual no sea la más correcta, motivo por el cual tienden a subirse en los bordillos para poder mirar recto.
- Los Quenosemenote: Ocultación del celular entre palma de la mano y oreja. La suerte natural es a izquierdas, controlando el guía con la derecha. Los más arriesgados optan por la suerte cambiada, a derechas, también denominada Quenosemenote Nidecoña.
- Los Cruzadomágico: sujección de auricular con mano izquierda y gestión direccional con la derecha, con un contorsionismo que limita el giro de la cabeza hacia la derecha, con lo cual vale más que vayamos recto.
- Los Sinmanos: en teoría son los legales. Pero son igual o más peligrosos que los demás. Porque, si se fijan uds., los que hablan por el manos libres, en un 78% miran a la radio mientras se comunican como si estuviera allí el que les habla. Así que es casi mejor coger el móvil con las dos manos, que por lo menos ves por donde vas.
Y me juego 50 pavos a que el carnetporpuntos no acaba con estas subespecies ni de coña. Una jena.